Primeros 1000 días

Recomendaciones para cuidar la salud auditiva


Todos los 28 de marzo se celebra el Día Nacional de la Audición. Una revisión periódica de la audición es fundamental para cuidar nuestra salud auditiva.

En el marco del Día Nacional de la Audición, el Ministerio de Salud de la Provincia del Neuquén recuerda que, en todo el territorio neuquino, los establecimientos públicos de salud garantizan el diagnóstico y la detección de problemas auditivos, al igual que la atención con profesionales capacitados/as y equipamiento acorde para este tipo de problemáticas. Además, se aconseja realizar una revisión periódica de la audición para cuidar la salud auditiva y consultar a un/a especialista en caso de ser necesario.

“A lo largo de todo el territorio de nuestra provincia, los establecimientos de salud cuentan con equipamiento y talento humano profesional capacitado para diagnosticar y detectar problemas auditivos”, señaló la ministra de Salud, Andrea Peve, y recordó que la revisión periódica de la audición es un primer paso para cuidar nuestra salud auditiva.

En este sentido, Peve indicó que el Sistema Público de Salud trabaja de acuerdo a los lineamientos del Plan Provincial de Salud 2019-2023, que en su eje estratégico de Maternidad e Infancia y la estrategia ‘Primeros 1000 Días’ garantiza además la evaluación auditiva de los recién nacidos y nacidas.

Para abordar la temática y llevar adelante todas las acciones necesarias para brindar accesibilidad a la población, el Programa de Atención y Detección Temprana de la Hipoacusia, dependiente de la Dirección de Atención Primaria de la Salud (APS), trabaja en red con una organización de complejidad creciente.

De esta manera, el funcionamiento y la evaluación básica de la audición se realiza en hospitales de todas las Zonas Sanitarias, mientras que los estudios de mayor complejidad o la terapéutica necesaria se efectúa en los servicios especializados del Castro Rendón y Heller, en la Ciudad de Neuquén, o en el Hospital de Villa La Angostura.

Desde el 2001 existe en nuestro país la Ley 25.415 que crea el Programa Nacional de Detección y Atención de la Hipoacusia que asegura a toda persona recién nacida el derecho a que su salud auditiva sea evaluada y garantiza el equipamiento auditivo necesario, ya sea con audífonos o implantes cocleares, más la rehabilitación auditiva indispensable para optimizar su desarrollo lingüístico.

En este sentido, desde el Programa Provincial informaron que anualmente se incorpora equipamiento como otoemisores, audiómetros, impedanciómetros y que recientemente se recibió desde el Programa Nacional un equipo nuevo de Potenciales Evocados Auditivos destinado al Hospital Castro Rendón. A su vez, señalaron que las y los profesionales en fonoaudiología realizan anualmente actualizaciones, jornadas y encuentros que apoyan su amplia tarea.

La audición es la vía habitual para adquirir el lenguaje, atributo que permite a las personas la comunicación, y los oídos pueden ser evaluados en cualquier etapa de la vida, desde el nacimiento hasta la edad adulta.

Dentro de las patologías asociadas a la audición, la más prevalente es la sordera (deficiencia auditiva o hipoacusia), es decir, un trastorno sensorial que consiste en la dificultad para escuchar sonidos, lo que altera el desarrollo del habla, el lenguaje y la comunicación.

La misma puede presentarse en forma unilateral (en un solo oído) o ser bilateral (cuando ambos oídos están afectados) y las causas pueden ser congénitas o suceder a cualquier edad por causas adquiridas.

Esta se puede clasificar en leve (puede requerir audífonos); moderada (requerirá audífonos muy probablemente); severa (requerirá audífonos potentes y, según el caso, implante coclear); y profunda o sordera (requerirá audífonos muy potentes, que en muchos casos no le alcanzarán para discriminar los sonidos y, probablemente, le será más útil un implante coclear).

Los síntomas a los que se debe prestar atención son:
● Problemas para seguir una conversación que se produce entre dos o más personas.
● Dificultad para oír en ambientes con mucho ruido.
● Problemas para diferenciar sonidos.
● Sensación de falta de equilibrio o mareo, sensación de presión en el oído o escuchar un zumbido.
● En niños y niñas: la falta de reacción ante ruidos fuertes, falta de balbuceo o que deje de hacerlo.

Ante la aparición de alguno de estos signos es necesario solicitar un turno con un/a especialista en audición (Médico/a Otorrinolaringólogo/a); seguir paso a paso las indicaciones médicas; y controlar tu audición en el área de Fonoaudiología del hospital más cercano a tu domicilio.

Asimismo, para tener oídos saludables se aconseja: usar tapones para los oídos en lugares ruidosos; revisar la audición regularmente; usar sólo audífonos recetados por un/a profesional especializado/a. Y, por otro lado, no es aconsejable: colocar hisopos o algodón dentro de los oídos; nadar o lavarse en agua sucia; compartir auriculares o tapones para los oídos; y escuchar sonidos fuertes o música alta.