Primeros 1000 días

El calor y los alimentos


Elegir alimentos frescos, beber agua segura y otras recomendaciones para evitar indigestiones y enfermedades transmitidas por alimentos.

Las fiestas de fin de año y el verano son épocas en las que hay que extremar las medidas de precaución e higiene, en relación a la elaboración de comidas; como así también, al elegir los alimentos que consumimos.

El consumo de agua segura debe estar acompañado por frutas y verduras, que aportan el requerimiento adicional de sales minerales que requiere el cuerpo. Es fundamental incluir alimentos de diferentes colores y texturas y se sugiere preparar comidas caseras, incorporar alimentos frescos, regionales y preferentemente de estación.

Por otro lado, para evitar la retención de líquidos, es necesario moderar el consumo de sal. Una opción es sustituirlo por hierbas frescas o especias como el perejil, la albahaca, el jengibre, la pimienta, el orégano, etc. Hay que recordar que los alimentos ultraprocesados y las conservas contienen grandes cantidades de sal, por lo que es preferible evitarlos y disminuir el consumo.

Incorporar a la dieta diaria cereales integrales que son ricos en nutrientes y facilitan la digestión. Son la alternativa ideal a los cereales refinados y los productos panificados que suelen tener alto contenido de grasas y azúcares.

Para prevenir las enfermedades transmitidas por alimentos (ETA), es fundamental el cuidado durante la manipulación y conservación de alimentos, la higiene personal y del ambiente, y el consumo de agua segura.

Algunos consejos:  

  • Elegir carne picada procesada en el momento; y consumirla de inmediato.
  • Exigir el uso de guantes en las panaderías.
  • Controlar las fechas de vencimiento de todos los productos. No comprar alimentos sin fecha, marca o números de registro, ni aquellos cuyo envase se encuentre en malas condiciones.
  • Los productos como las carnes, aves y pescados deben guardarse en bolsas, separados de otros alimentos, para evitar que los jugos de los mismos puedan contaminarlos.
  • Evite mezclar alimentos crudos y cocidos. Se deben utilizar distintos utensilios para manipular los alimentos crudos y los cocidos.
  • Lavar las verduras y las frutas antes de ubicarlas en la heladera. Proceda de la misma forma con los envases de bebida.
  • Evite cocinar verduras sin haberlas lavado previamente: la cocción puede destruir la contaminación microbiana presente, pero no los contaminantes químicos (pesticidas, fertilizantes).
  • Consumir agua segura. Si no posee agua de red controlada, se aconseja hervirla antes de usarla.
  • Lavar manos antes de comer o manipular alimentos; también después de ir al baño o de cambiar pañales.