Primeros 1000 días

Día del Médico Rural


El gobierno de la provincia del Neuquén, a través del ministerio de Salud y Desarrollo Social, recuerda que el 4 de julio se instituyó como día del Médico Rural por la Ley Nacional Nº25.448, en conmemoración del natalicio del doctor Esteban Laureano Maradona.

En la región, durante las décadas de 1960 y 1970, los profesionales pioneros arribaron a Neuquén para instalarse en toda la extensión del territorio. El estímulo fue llevar adelante un Plan de Salud con equidad en el acceso a la salud, universal y con el objetivo de garantizar el abordaje de toda la población.

Dentro de ese Plan de Salud, en 1974 se creó en la provincia la residencia en Medicina Rural, con sede en el Hospital Provincial Castro Rendón. La finalidad del programa fue formar profesionales capaces de desempeñarse idóneamente en los pequeños hospitales rurales del interior.

Después, en base al mejoramiento de la situación sanitaria y al impacto producido por la residencia –que recibió universitarios de distintas provincias del país–, los contenidos se modificaron y se actualizaron de acuerdo a las necesidades emergentes. En su inicio el requerimiento era de dos años de duración y su sede se ubicaba en el Hospital Regional Castro Rendón.

Luego la residencia de Medicina Rural evolucionó registrando cambios en su denominación pasando a ser residencia de Medicina General o Familiar. En 1989 la residencia se subdividió en dos sedes con asentamiento en el Hospital Bouquet Roldán y Hospital Zapala; y en el año 2003 el lugar del Hospital Bouquet Roldán lo asume la Zona Sanitaria Metropolitana incorporando al Hospital Horacio Heller y los centros de salud como Centros Formadores.

El 4 de julio se celebra desde el 2001 el día del Médico Rural por Ley Nacional Nº25.448, en conmemoración del natalicio del doctor Esteban Laureano Maradona. Nació en Esperanza el 4 de julio de 1895 y falleció en Rosario el 14 de enero de 1995. Médico rural, naturalista, escritor y filántropo argentino, quien durante cincuenta años ejerció la medicina en Estanislao del Campo, en la provincia de Formosa.

Su vida estuvo ligada a la asistencia a las comunidades indígenas. Realizó grandes aportes al conocimiento de las colectividades del noreste argentino, estudió sus costumbres e incorporó a sus conocimientos los de la medicina tradicional aborigen. Entre sus obras se destacan la construcción de una colonia para personas con lepra y también la fundación de la primera escuela bilingüe del país, un pequeño establecimiento educativo que, en Formosa, brindaba clases para integrantes de pueblos originarios, utilizando en parte su lengua madre.